No hay descanso para los amigos de lo ajeno ni tampoco para las soluciones en fijaciones que puede ofrecer Tormetal. En el anterior artículo que publicamos sobre tornillos antivandálicos o antihurto veíamos distintas maneras de proteger las fijaciones de manipulaciones no deseadas y en éste, veremos otros sistemas de tornillos antivandálicos no tan extendidos.
Ejemplos de tornillos antivandálicos o antihurto
Tuercas cuadradas de seguridad
Estas tuercas se montan en pares, pero sólo una de ellas permanece fijada tras la aplicación. El método es simple: mientras tenemos las dos tuercas alojadas en la rosca, podemos ejercer tracción con una llave común. Una vez hemos apretado la tuerca de seguridad, retiramos su homónima dejando la fijación lista. Sólo podremos aflojarla usando de nuevo una tuerca homónima y repitiendo el proceso de forma inversa.
Tuercas de seguridad con rotura
Estas tuercas disponen de una parte tractora (forma hexagonal) y una parte tensora (forma circular). Cuando apretamos esta tuerca hasta su par de rotura, la parte hexagonal se rompe impidiendo que sea aflojada por el mismo método.
Tornillos triwing
Estos tornillos, normalmente rosca-chapa, tienen una impronta muy peculiar y poco común, por lo que se catalogan como tornillos de seguridad. Es muy improbable que alguien disponga de la herramienta necesaria para su manipulación.
Tornillos de cuadradillo
Estos tornillos, como los anteriores, disponen de una impronta poco común con forma de punzón cuadrado. Suelen ser tornillos con rosca para madera y con una muy baja gama de dimensiones. A excepción del resto de tornillería de seguridad, estos tornillos son habituales en acero zincado y no en acero inoxidable.
Quizá ahora que sabemos de la existencia de estos tornillos antivandálicos podamos irnos de vacaciones con cierta sensación de seguridad.
¡Felices vacaciones!
